Hay que saber ser flor mientras vuelan guadañazos. Ser princesa sin un rey, que te estreche entre sus brazos.
Saber ser un ángel, en un infierno permanente.
Ojalá que la vida me siga presentando gente, con un grado mínimo de tu sensibilidad.
Para así poder creer que, aún hoy, puede haber honestidad.
03 noviembre 2010
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Tell me baby; what's your story?